Desmontando mitos

Empezamos hoy una serie llamada "Desmontando los mitos del islam". Y para estrenarnos, hoy nos dedicaremos a demontar la primera mentira convertida en mito "políticamente correcto": El islam valora y respeta las culturas pre-islámicas de los países musulmanes.

Los musulmanes no respetan sino que desprecian y denigran a los no musulmanes, y esto incluye a las culturas pre-islámicas.

Como primera prueba de ello, encontramos la invasión a Persia, sólo 5 años después de la muerte de Mahoma, y todo el pasado glorioso de Persia fue declarado "época oscurantista" por los islámicos.

Otro ejemplo lo vemos en el cacareado Al-Andalus, en el que nos quieren vender supuestos progresos científicos, literarios, arquitectónicos, etc., cuando en realidad la barbarie musulmana se asentó sobre una de las culturas más avanzadas de la humanidad: la judeo-romano-visigótica, que era la preponderante en el territorio español en el 711 d.C. Los romanos sí habían desarrollado la literatura y la arquitectura, y los judíos fueron los más altos exponentes de la ciencia. De hecho, los musulmanes sólo pueden presumir de Al-Andalus porque no lograron exterminar lo que encontraron. No sucedió lo mismo en Egipto, ni en Túnez, ni en Argelia, ni en Marruecos, donde hicieron tabula rasa con todo lo que encontraron.

Y sin irnos demasiado lejos en el tiempo, hemos visto con nuestros propios ojos la barbarie coránica en nuestros días:

* los musulmanes del norte de Chipre, tomaron el monasterio de San Macario -originario del Siglo IV- para transformarlo en un hotel.

* En Libia, Kadhafi tranformó la catedral católica de Trípoli, en una mezquita (ahora, después de muchos años de negociaciones con él, parece que la devuelve -no a la Iglesia Católica- sino a la Anglicana).

* En 2001, los talibanes de Afganistán dinamitaron los famosos budas de Bamiyán, esculpidos en roca arenisca durante los siglos III y IV. Junto con estos budas -considerados los más grandes del mundo- se destruyeron miles de figuras arqueológicas, porque el archifamoso mullah Omar decretó que eran ídolos.

Europa se salvó una vez de padecer esto, gracias a bravíos españoles que a fuego y sangre, y durante 8 siglos pelearon por reconquistar su territorio y echar al invasor musulmán. ¿Qué sucedería si la amenaza de Eurabia se concreta?

¿Veríamos impasibles que monasterios sean convertidos en hoteles? ¿Aceptaríamos parsimoniosamente que la la Catedral de Notre Dame, o la de León, o la de Sevilla, Colonia o Cracovia convertidas en mezquitas?