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martes, diciembre 26, 2006

Revoluciones culturales: Mientras China se hace cristiana, Europa se vuelve musulmana

A través de Noticias de Eurabia nos llega este post de Fjördman en el que analiza los cambios culturales provocados por las 2 grandes "revoluciones culturales”: la Revolución Cultural china y la europea de “Mayo del 86”.


La Revolución Cultural acabó con los vestigios del pasado tradicional chino y ha permitido que la religión cristina crezca de forma imparable

"Buddhism and Taoism still claim most worshippers in China but the state-sanctioned churches count up to 35 million followers. The underground churches are estimated to have 80 million members or more, about 12 million of them Catholics, the rest Protestants."

Aquí nos explican las causas:

“I think human beings need something at a spiritual level. We don’t want to believe we are coming from nowhere; going nowhere. In China we have traditionally followed Buddhism. We had quite a deep religion. But communism destroyed everything. When communism became this corrupted thing which failed everybody, people still needed a belief. I think that’s the reason for Christianity in China.”

También esto es muy bueno:

"It is noteworthy that the capitalist economy of China and South Korea is booming at the same time as Christianity is spreading among Chinese and Koreans. Christianity is retreating in Europe, which is in serious economic decline. "

Algunos dicen que “todas las religiones son iguales”, pero algunas parecen más iguales que otras. O más eficientes.

En Europa –y en EE UU, aunque la distancia les ha preservado de la marea migratoria mahometana- la revolución cultural ha traído como consecuencia el colapso demográfico y la inmigración musulmana, que acabará destruyéndola. Tras exponer estos dos fenómenos históricos, Fjordman compara la resistencia cultural de catolicismo y protestantismo al Islam y hace dos observaciones interesantes.

La primera es que no está claro que los países católicos puedan resistir mejor la agresión musulmana. Sus tasas de natalidad son inferiores:

"even in nominally Calvinist the Netherlands and Lutheran Scandinavia, the native population has higher birth rates than in Catholic Italy, and I’m not convinced that Catholic Spain under its current Socialist government is stronger than Lutheran Denmark. "

Y yo añado por mi cuenta: sus derechas son patéticas. El problema está en la reacción anticlerical del siglo XIX, que ha mantenido escindidos a estos países. Además, en el segundo cuarto del s. XX las derechas han dejado de ser derechas y se han apuntado al discurso cultural de la izquierda. Un desastre.

La segunda es que la Iglesia de Roma está plagada de protodhimmíes y proislámicos (cuando la critico digo de Roma en vez de católica, una pequeña maldad por mi parte). Fjordman se refiere a estas famosas palabras del documento Nostra Aetate, doctrina oficial de la Iglesia:

La Iglesia mira también con aprecio a los musulmanes que adoran al único Dios, viviente y subsistente, misericordioso y todo poderoso, Creador del cielo y de la tierra, que habló a los hombres, a cuyos ocultos designios procuran someterse con toda el alma como se sometió a Dios Abraham, a quien la fe islámica mira con complacencia. Veneran a Jesús como profeta, aunque no lo reconocen como Dios; honran a María, su Madre virginal, y a veces también la invocan devotamente. Esperan, además, el día del juicio, cuando Dios remunerará a todos los hombres resucitados. Por ello, aprecian además el día del juicio, cuando Dios remunerará a todos los hombres resucitados. Por tanto, aprecian la vida moral, y honran a Dios sobre todo con la oración, las limosnas y el ayuno.

Fjordman es muy crítico con estas frívolas palabras: “¿cómo puedo fiarme de una la Iglesia incapaz de advertir a sus fieles sobre la naturaleza satánica del Islam?”. No le falta razón, aunque la declaración anterior puede leerse jesuiticamente y considerar que el documento apunta a algunas creencias de los musulmanes, no al Islam en sí. Seguiría el lema progre “Odia la delito y compadece al delincuente”. Aunque me estoy engañándo a mí mismo, porque sigue así:

"Si en el transcurso de los siglos surgieron no pocas desavenencias y enemistades entre cristianos y musulmanes, el Sagrado Concilio exhorta a todos a que, olvidando lo pasado, procuren y promuevan unidos la justicia social, los bienes morales, la paz y la libertad para todos los hombres. "

¿Desaveniencias? Agresión continua que solo se detiene cuando faltan las fuerzas. Creo que ese documento solo se explica tras 150 años de decadencia en el Islam. Creerían los de la mitra que el Mahometismo estaba entonces herido de muerte como doctrina política de conquista opresión.

En todo caso, no me parecen mal estas declaraciones retóricas, siempre y cuando en la práctica haya firmeza, mano de hierro en guante de seda. Desgraciadamente, una vez más, no es el caso.

Para acabar, Fjordman menciona un curioso refrán: “Praise the Lord and pass the ammunition”. Es decir, Da gloria al Señor y pasa las balas. Casi supera al nuestro: “A Dios rogando y con el mazo dando”. Buen lema para estos tiempos.

The Outcome of Two Cultural Revolutions: While China Turns Christian, Europe Turns Muslim


Baby

 

 

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